Primer trimestre del 2020
A comienzos del año 2020, como sociedad nos enfrentamos a una enfermedad contagiosa casi desconocida que puede llegar a causar hasta la muerte si no se tiene un cuidado previo, desde el primer caso de covid-19 en México, Nuevo León comenzó a movilizarse para tratar de no propagar aún más los contagios y cuando llegó el primer caso al estado se realizó el comunicado sobre la suspensión de clases presenciales hasta nuevo aviso así como algunos trabajos de oficina, sucursales de comida y centros comerciales, provocando el despido de trabajadores, recortes de sueldos e incluso la quiebra para algunos locales con dueños propios. Siendo así nuestra nueva normalidad se ha convertido en un aislamiento, esto como medida para evitar el contagio masivo.
El Banco de México menciona que desde el año 2019 se ha visto una respuesta negativa del Producto Interno Bruto (PIB) y aunque la pandemia provocada por el Covid-19 fue una de las causas de la variación negativa del año 2020 por la cancelación de varias actividades, al principio del 2020 ya se veía una contracción del Producto Interno Bruto de -1.2%, es decir que desde antes ya actividad económica en México ya se veía afectada.
Al comienzo de los primeros meses después del primer caso de coronavirus en México se registró una respuesta realmente negativa y sin precedentes del Producto Interno Bruto, pues llegó a tener una variación negativa de hasta -17.3%. Esta cifra sobrepasa realmente la afectación del Producto Interno Bruto en la crisis de 2008-2009 y nos demuestra que el país enfrenta aún una crisis extremadamente grave que sigue afectando negativamente la economía de México.
Durante el primer trimestre del año 2020, la tasa de desocupación quedó estable con un porcentaje de 3.4, pero al comienzo del segundo trimestre algunos sectores habían comenzado a ser impactados en la actividad económica. En cuestión a la proporción de hombres y mujeres ocupados es muy similar, por lo tanto, la tasa de desempleo no muestra una significativa diferencia de género.
Otro panorama de las complicaciones laborales es la no ocupación de la mano de obra la cual representa cierta cantidad de la población ocupada que indica necesidad y disponibilidad de ofrecer más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual ya le pide y desde el primer trimestre del 2020 se ha confirmado este impacto, puesto que también es probable que esta cantidad sea un reflejo del efecto negativo que se obtuvo de la pandemia en el mercado laboral.
Martínez y Montemayor (20/05/2021)